Los embutidos siempre son uno de los platos estrella en celebraciones, fiestas y reuniones con familia o amigos, ya sea en un aperitivo, comida o cena. Pero al igual que ocurre con el jamón hay que saber cómo cortar y presentar el lomo, chorizo o salchichón para conseguir que en el momento de tomarlo su sabor, aroma y textura se potencien y su degustación sea todo un éxito.
Antes de proceder a cortar el embutido lo más recomendable es quitar primero la piel que lo cubre, pero no entera, sino hasta donde vayamos a cortar para que no se reseque. Para cortarlo deberemos hacerlo encima de una tabla de madera y tener a mano un cuchillo sin sierra que esté muy afilado, para que nos permita obtener esas lonchas finas que casi se desharán en la boca. En cuanto al tipo de corte es mejor que se realice en diagonal para una presentación más estética.
Si se ofrecen varios tipos de embutidos es recomendable presentar cada uno en un plato distinto para que no se mezclen los olores y se desvirtué el sabor tan especial de un buen embutido. Y para evitar que el lomo se seque y pierda su increíble sabor lo serviremos recién cortado.
Si no eres un experto cortando embutidos y quieres ahorrarte hacer un estropicio también puedes comprar el embutido loncheado. Solo tendrás que acordarte de sacarlo de la nevera un rato antes de tomarlo para que el embutido esté a temperatura ambiente y las lonchas no se queden pegadas.
En Nico Jamones tenemos una selección de los mejores embutidos ibéricos y serranos que puedes adquirir en piezas enteras o en paquetes loncheados y listos para consumir en el aperitivo, la comida o la cena.