Jamón seco o duro: cómo solucionarlo

En esos días en los que has trabajado duro y te mereces un capricho, no hay nada más decepcionante que llegar a casa y encontrarse con el jamón se ha secado o endurecido: el cuchillo no se desliza, las lonchas se rompen o la textura no es la esperada. Pero no te preocupes, en Nico Jamones te desvelamos cómo evitar que un jamón se seque y, lo más importante, cómo solucionarlo si ya te has encontrado con este problema. ¡Descubre con nosotros los secretos para disfrutar siempre de un jamón en su punto óptimo!

¿Por qué se queda un jamón seco o duro? Causas comunes

Podemos adquirir el mejor jamón, pero debemos llevar a cabo una buena conservación en casa para que se mantenga en perfecto estado por más tiempo. Veamos algunos de errores más comunes que aceleran su deshidratación.

• Mala ubicación: guardar el jamón en un lugar con excesivo calor, poca ventilación o demasiada exposición a la luz.
• Exposición excesiva al aire: una vez abierto el jamón, la zona de corte debe estar protegida para que la superficie no se seque y endurezca, formando una capa que dificultará el corte.

• Corte inadecuado de la pieza: un corte irregular, dejando demasiada superficie de carne expuesta o no avanzando de manera uniforme, puede contribuir a que ciertas zonas se sequen más rápido que otras.

Señales que indican que un jamón está seco

Detectar a tiempo que tu jamón se está secando te permitirá actuar para intentar solucionarlo.

• Aspecto visual y textura al tacto: la zona de corte o algunas partes de la corteza están resecos y más oscuros de lo normal. Al tacto, la carne está rígida, sin la flexibilidad y untuosidad propias de un jamón en su punto. La grasa que debería ser brillante y suave, puede verse opaca y dura.
• Dificultad al corte: al intentar lonchear, el cuchillo no se desliza con facilidad, la carne se rompe en lugar de cortarse limpiamente, o cuesta un esfuerzo considerable obtener cada loncha.
• Sabor y aroma alterados: un jamón seco puede perder intensidad en su sabor, volviéndose más salado o incluso rancio en algunas zonas. El aroma característico de la curación puede atenuarse o, por el contrario, adquirir notas más intensas y desagradables si la grasa se ha oxidado demasiado.

Jamón seco o duro: métodos efectivos para solucionarlo

Si a pesar de los esfuerzos, tu jamón ha terminado con partes secas o duras, no todo está perdido. Hay formas de rescatarlo y aprovecharlo al máximo.

Rehidratación de la parte seca

Estas técnicas pueden ayudar a ablandar la parte más superficial, ideal para lonchas que vas a consumir en el momento.

• Aceite de oliva: unta ligeramente la superficie de las lonchas más secas con unas gotas de aceite de oliva virgen extra y déjalas reposar unos minutos. El aceite penetrará en la carne, ablandándola y realzando su sabor.
• Grasa del propio jamón: para las piezas enteras, puedes colocar las lonchas de tocino en la zona de corte y envolverla firmemente con papel film. Asimismo, puedes frotar la zona de corte y la parte interior del jamón más propensa a secarse con las mismas lonchas de tocino.

Aprovechamiento de la carne dura para cocinar

La carne de jamón duro que no es apta para lonchear puede convertirse en el ingrediente estrella en diferentes recetas:

• Caldos y cremas: el hueso del jamón y los recortes de carne más duros son perfectos para dar un sabor inconfundible a caldos, sopas, cremas o consomés. Añaden una profundidad umami que realza cualquier preparación.

• Guisos y cocidos: corta la carne dura en taquitos y agrégalos en guisos de legumbres, arroces caldosos o estofados. Se ablandarán con la cocción y aportarán un sabor intenso.
• Croquetas y revueltos: las virutas o taquitos de jamón seco pueden ser la base perfecta para unas croquetas caseras o en revueltos de setas o espárragos, aportando textura y ese toque salado tan característico.
• Otras soluciones: puedes picar la carne muy finamente para hacer patés, utilizarla como topping en pizzas caseras o incluso incorporarla en masas de pan o empanadas.

En Nico Jamones, nuestra pasión por el jamón nos impulsa a ofrecerte lo mejor para que disfrutes al máximo de cada pieza.  Un jamón seco o duro no tiene por qué ser un caso perdido. Con los métodos adecuados de prevención y solución puedes vivir una experiencia gastronómica sinigual. Te invitamos a explorar nuestra selección de jamones ibéricos y serranos en diferentes formatos y encuentra el que mejor se adapte a cada ocasión. ¡Porque la vida con jamón sabe mejor!